Hermano de Zuanne, padre de Vettore, Daniele y Marco de la Villa di Bagnolo, era Francesco Pisani, otro patricio veneciano a quien podrÃa llamar amigo. Los Pisani dal Banco se puede decir que gobernaron la propia Venecia. El crédito del estado para la familia bancaria ascendÃa a cientos de miles de ducados, por lo que sin los fondos de los pisanos, se puede decir que Venecia no habrÃa sostenido la Liga de Cambrai. Francesco fue eclesiástico entre los pisanos, cardenal veinteañero en la basÃlica de San Marcos, sin siquiera haberse mudado a Roma.
Luego obispo de Padova y Treviso, administrando también la archidiócesis de Narbonne, en Francia. Un hombre que no solo era muy rico sino también muy culto, como muchos otros de su tiempo, querÃa que yo -que ya conocÃa a Daniele Barbaro- y nuestro amigo común Alessandro Vittoria, diseñaramos su residencia en Montagnana. Residencia privada hoy em dìa, aún reconozco el sabor nostálgico de los gloriosos tiempos perdidos.