Una de nuestras bicicletas eléctricas Palladian se llama Ophelia.
Creada por el intelecto de William Shakespeare, encontramos a la doncella y su trágica historia entre las páginas de la tragedia Hamlet, ambientada en la corte danesa.
Ofelia, la sensible hija del chambelán de la corte, cree que los halagos románticos del joven príncipe Hamlet esconden otros propósitos más bajos. Cada vez más confundida y presa de la conducta impuesta por su padre y su hermano, presa por el rastro de sangre que impregna los hechos desencadenados por Hamlet, y habiendo perdido el poder de la razón, se entrega al señuelo de la muerte: exhausta y angustiada. , se tira a un río y se ahoga.
Ofelia es la representación de la sensibilidad inocente, de la ingenuidad del amor joven. Es un alma pura, enredada en turbias conspiraciones palaciegas, que no ve otra forma de salvarse que la muerte. Es una figura que enriquece con detalles brillantes una historia oscura con implicaciones crueles.
Pero el trágico final de la niña siempre ha inspirado al mundo del arte. Existen numerosas pinturas que la retratan perdida en sus pensamientos o dulcemente transportada por la corriente, muchas de ellas creadas por el artista prerrafaelita John William Waterhouse quien encontró en Ofelia un tema de inspiración inagotable.